Claudio Riaño festeja el primero de sus dos tantos |
Independiente y Quilmes igualaron bajo una lluvia de goles 3
a 3 en un emocionante encuentro bajo la
lluvia que disputaron esta noche en el
estadio "Libertadores de América" por la séptima fecha del torneo
Transición 2014.
Brian Sarmiento abrió
el marcador a los 10 minutos del primer tiempo. Igualó a los 26 el arquero
Rodríguez de penal.
En el complemento
anotó nuevamente Rodríguez por la misma vía a los 7 minutos. Alargó la distancia
Riaño a los 15. Cuando parecía que el partido se inclinaba para el local
Klusener de penal achicó la diferencia a los 26 minutos y Zacaría empató a los
39. Postreros tantos de Riaño a los 45 minutos y Mancuello a los 48 le dieron
cifras definitivas al tanteador.
Desde el comienzo, Independiente
fue quien propuso más, tenía la tenencia
del balón y manejaba los hilos del encuentro, a la hora de atacar, lo hacia de
forma correcta, pero no era punzante para lograr abrir el marcador.
A los 10 minutos,
tras un mal achique de la ultima línea roja, Brian Sarmiento aprovechó que
Cristian Tula lo hablitiba y tras un fuerte remate de zurda, venció a un
Rodriguez que no tuvo mucho que hacer.
El “Rojo” fue en busca del empate, pero lo perdió la
posibilidad en varias ocaciones, hasta que a los 24 minutos, el defensor Carli
le cometió penal a Martin Lucero y 120 segundos más tarde, el arquero local
puso las cosas iguales.
El segundo tiempo
continuó con la lluvia, pero además comenzó la lluvia de goles, debido a que a
los 7 minutos, nuevamente de penal, Rodriguez puso al “Rojo” arriba en el
marcador, tras la falta que le cometieron al reciente ingresado Matías Pisano. Ocho
minutos más tarde, la figura del encuentro, Claudio Riaño extendió el marcador
para Independiente tras capturar el rebote del arquero del equipo del Sur
bonaerense.
Todo parecía encaminado
para el “Rey de Copas”, pero Pablo Quatrochi decidió jugársela y mandó a la
cancha a Adrian Fernandez, que a los 26 minutos, fue derribado por Tula, y el
delantero Klusener desde los 12 pasos descontó en el marcador.
Quilmes comenzó a
buscar el empate milagroso por todos los medios y a los 39 minutos, logró la
hazaña, tras una serie de rebotes y un mal cierre por parte de los jugadores,
Zacaría puso las cosas iguales y le ahogaba la fiesta al equipo de Jorge
Almirón.
Cuando la noche parecía
tener un final triste, el diablo metió la cola y Claudio Riaño metió una
pirueta en el minuto 45, para darle la victoria agónica a Independiente, pero
había lugar más, tres minutos más tarde, el propio delantero asistió a Federico
Mancuello y con gambeta incluida al arquero liquido el pleito.
Nota realizada por Leonardo Gonzalez (@leito_sg)
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