LUCAS PUSINERI

Desde su Almagro natal, allá por 1992, hasta este tiempo en el que transcurrieron más de 300 partidos en Primera y un título inolvidable en 2002 con un gol también inolvidable ante Boca, Lucas Pusineri aprendió mucho en el mundo de la pelota. Sabe que en los torneos estivales "una golondrina no hace el verano". Por eso reflexiona después del triunfo ante San Lorenzo: "El objetivo es llegar al comienzo del campeonato de la mejor manera y lograr los resultados que nos debemos en partidos oficiales".

El mediocampista jugó sus primeros noventa minutos de la temporada y junto a Ismael Sosa, Hernán Fredes y Leandro Depetris (tuvo su bautismo de fuego en Independiente) construyeron una sociedad ideal para abastecer a Daniel Montenegro. "La idea fue siempre jugar en conjunto. Pero contra Boca no se pudo. Para la mayoría fue el primer partido después de una pretemporada exigente. Todos sabemos lo que puede dar el Rolfi cuando toda la responsabilidad no recae en él. En el fútbol lo que hay que buscar son sociedades", afirma. Y al hablar de laderos, Pusineri tuvo en el juvenil Sergio Vittor a un buen acompañante en el esquema que planteó el entrenador Miguel Angel Santoro con dos mediocampistas centrales. "Lo vi muy bien. Creo que en general corrimos bien la cancha y estuvimos precisos. Me alegro por él y también por el Tano Depetris, que hace rato viene trabajando, tuvo su oportunidad y no la desperdició". Sobre su rendimiento personal, dijo estar muy bien en lo físico. "El primer partido siempre cuesta, pero terminé bien, quise jugar los 90 minutos".

Como el nombre del chileno Gary Medel sigue sonando, como la intención es incorporar a alguien que arribe al club para jugar en el mediocampo, Pusineri consideró que la llegada de jugadores con experiencia y roce internacional es positiva. "Siempre es muy bueno sumar calidad. En lo personal la expectativa es la misma de siempre. Acá nadie tiene el puesto asegurado y después del campeonato que hicimos no podemos permitirnos otro fracaso. Se podrá ganar, empatar o perder, pero así como está, de este plantel tiene que surgir un equipo que juegue bien. Y si hay refuerzos, mejor. Yo, en especial, deseo que le vaya bien a Eduardo Tuzzio y los que estamos arriba de los 30 le podamos dar confianza a los pibes. Al Rolfi, lo único que hay que hacer es devolvérsela redonda..." dijo antes de dejar Salta el veterano volante que no baja los brazos y pelea por su lugar.