UN CAMIÓN DE GOLES Y PROBLEMAS

Independiente tocó fondo en Avellaneda y consiguió una derrota inesperada, dolorosa y que enciende las luces de alerta ante el cercano clásico del próximo domingo. Un contundente 4 - 0 en contra frente a Velez que llena de dudas a Almirón y a los propios jugadores, quienes se retiraron sin hablar con la prensa por segundo partido consecutivo.



Cuatro goles en 45 minutos sufrió el equipo dirigido por Jorge Almirón, que en un principio parecía el dominador del partido pero Velez aguantó bien las llegadas del "rojo" y tuvo todo el complemento para hacerse un festín con su rival.

En la primera etapa, Independiente no pasó sobresaltos aunque tampoco fue un equipo ordenado, con juego asociado y menos que todo con los jugadores metidos en el partido. La línea de tres no funcionaba, con Figal siendo el que peor la pasaba y Cristian Tula y Victor Cuesta se las arreglaban para poder sacar al equipo, factor que de a poco, fue desgastandose.

En la mitad de la cancha, el único que hacía el esfuerzo era Jesús Méndez que corría y metía todo lo que sus compañeros no. Federico Mancuello tuvo dos oportunidades de gol, pero nada más que eso y luego se apagó para entonar con los demás. Por las bandas se vió la peor falencia del equipo, ya que tanto Gómez como Villalba no pudieron hacer pie. En el caso del ex Argentinos, siempre buscó la dificil y tuvo que volver para atrás, nunca debordó y fue el que más sufrió cuando Velez atacaba. Por izquierda, Villalba no sufrió en defensa pero no le salió una para atacar, le rebotaban las pelotas y se vió superado por Cubero en todo momento.

Del medio hacia adelante, lo único a rescatar fueron dos sociedades entre Riaño y Montenegro, intentando romper el cero. Regular primer tiempo del equipo, que se iba al descanso lleno de murmullos y con más dudas que certezas.

Al complemento iba a entrar Independiente con dos cambios, para buscar mayor capacidad ofensiva desde los apellidos, pero no así con el cambio de esquema. Pisano ingresaría por Gomez, mientras que Francisco Pizzini haría lo propio por Montenegro.

El equipo se paró 4-4-2 para comenzar pero luego se desordenó y generó un caos total en cada uno de los jugadores. Tal es así que, a los dos minutos de juego, Pratto aprovechó un desconcierto en la defensa y definió solo frente a Rodriguez, marcando el 1-0. Minutos más tarde sería el mismo Pratto el encargado de marcar el 2-0, tras recuperar una pelota perdida por Lucero y enviarla al fondo de la red para todo el desconcierto del Libertadores de América.

El 3-0 llegaría de la manera menos pensada. Tiro de esquina a favor de Velez Sarsfield ejecutado por Rolón, y un Diego Rodríguez pésimamente acomodado permite que el balón entre olímpicamente desde el córner derecho. Más allá del error, del cual fue responsable, el arquero de Independiente impidió que la goleada sea mucho mayor ya que sacó varios remates que podrían haberlo complicado aún más.

Desconcertado, Independiente iba a recibir el cuarto gol por medio de una contra, algo ya común en los atacantes de Velez en el segundo tiempo. El mediocampista Lucas Romero consiguió llevarse la pelota tras forcejear con dos jugadores del "rojo" para definir por el suelo ante el arquero, que quedó mirando desolado.

Desastrozo el partido de Independiente, que sin proponer, intentar y jugar al fútbol tiene compromisos más que importantes a corto plazo. Muchas dudas para tan pocos partidos de evaluación, pero lo cierto es que Jorge Almirón comienza a ser visto de reojo por el hincha de Independiente. ¿Por qué no volver al equipo que dió buenos resultados? Una nueva semana de trabajo comienza en Independiente y en el horizonte está nada menos que Racing, partido que será clave en la consideración del DT.


Escrito por Bruno Gomez - @brunoegomez