RECUPERAMOS LA MEMORIA

Gallego resaltó el nivel y la propuesta: "No tenemos ni un jugador de marca en el medio". Y pela cábala...

La sala de conferencias se abre 15 minutos después de finalizado el partido. Las cámaras se acomodan en la parte de atrás, las mullidas sillas reciben asentaderas ávidas de preguntar, hay prueba de micrófono. Pero, otra vez, se asoma una voz tímida desde la puerta que une la sala con el vestuario para informar que Américo Rubén Gallego no hablará allí. Que habrá que ir al vallado donde atienden los jugadores, nomás, para escucharlo.

Es un detalle Gallego, una cábala más de las que adornan su figura. Como, cuando le mueve la pelota, se la esconde entre los pies, a Santiago García, ansioso por sacar un lateral. También está el Tolo ganador, siempre sediento de títulos, encaminado a la pelea por el Clausura. En ese tren, respira por el sonido de despertador que se oyó en el Libertadores de América. "Recuperamos la memoria, sobre todo en el caso de algunos jugadores. Tuvimos siete jugadas muy importantes en el primer tiempo. Veníamos de tres partidos que ganábamos pero jugábamos mal. Y no nos podemos equivocar con ustedes (mirando a los periodistas), porque nos matan", cerró el análisis con la primera bravuconada con su sello.

Siguiendo con el foco en el juego, insistió con el concepto ofensivo de su escuadra. "Yo siempre pido que no nos desordenemos atrás, pero no nos resignamos, eh. No tenemos ni un jugador de marca en el medio", chapeó. También se golpeó el pecho a su estilo. "Estaba cansado de decirle a Mareque que pateara al arco, por suerte me hizo caso", se anotó en el 1-0. "Mancuello hizo el mejor partido desde que estoy yo. Fíjense que no le grité", le sacó al volante el cartel de alquiler.

¿Y las chances de título? "Vamos partido tras partido. Le pido a la gente que no se ponga tan loca, que siga acompañando".

DIARIO OLE