NO GUSTÓ, PERO GANÓ Y ENTRÓ EN PUESTO DE ASCENSO

Independiente se llevó un triunfazo de Pergamino, tras jugar frente a Douglas Haig y comenzar perdiendo tras un penal bien sancionado por Álvarez. Con los cambios, desde el banco De Felippe supo remontar el partido y dar vuelta la historia, para llevarse los tres puntos y seguir soñando por un lugar en primera división, que por ahora es del "Rojo" hasta que juegue Instituto.

El equipo dirigido por Omar De Felippe jugó mal todo el partido aunque a fuerza de voluntad y vergüenza deportiva fue a los tumbos a buscar el empate, lográndolo agónicamente en los últimos veinte minutos con buenos desempeños de los jugadores que ingresaron desde el banco de suplentes.

En el primer tiempo, se disputó un encuentro áspero donde no atacaban para no generar espacios con Douglas Haig replegado en defensa e Independiente sin jugadores para hacer el desequilibrio. La postal era esa, mucho juego aunque pocas llegadas y chances claras de gol. La mas clara la tuvo el equipo local en los pies de Orfano, quién desperdició una chance neta de gol enviando el balon por encima del travesaño.

Ya en el complemento, el panorama era distinto porque Douglas salió decidido a marcar el primer gol, llegando en manifiestas oportunidades al arco de Rodriguez aunque el "ruso" estaba inspirado en la tarde noche de Pergamino. Recien a los 11 minutos iba a aparecer la chance mas clara, cuando entre Zapata y Morel Rodriguez le cometen un irrisorio penal al incontrolable Mazza, y fue Etevenaux el encargado de convertir.
Sí, Independiente corria de atras nuevamente y todo se hacía mas complicado, teniendo en cuenta que el equipo no generaba ni un suspiro. Ni los pases podían hacer que regalaban la pelota. De Felippe apostaría, a los 3' de convertido el gol por el ingreso de Matías Pisano, para hacer el desequilibrio en la banda derecha. Cambio acertado del entrenador ya que por lo menos, generaba ganas en sus compañeros para ir al ataque. Minutos mas tarde iba a ingresar Francisco Pizzini, quien fue a la banda izquierda para romper la monotonía del juego con su velocidad. Poco podrían hacer, ya que los delanteros estaban poco finos a la hora de marcar, para colmo iba a retirarse Facundo Parra lesionado, con una distensión que segun sus propias declaraciones "se pierde lo que resta del torneo". En su lugar ingresaría Federico Insúa, hombre clave para el desarrollo de los minutos finales. El pocho hizo todo bien desde el primer minuto en cancha, ya que estuvo en el momento justo para enviar el balón al fondo de la red. Independiente igualaba el marcador sin merecerlo, y el ingreso de Insúa pareció atemorizar a los jugadores de Douglas Haig, ya que luego del mismo comenzó su debacle. El enganche se encargó de ordenar a sus compañeros, abriendo juego por las bandas y centralizando en el único delantero en cancha, Sebastián Penco que iba a ser clave para convertir el segundo gol que llegaría a los 23 minutos empujando el balon adentro del arco del equipo local luego de una buena habilitación de Matías Pisano.
Independiente ganaba el partido en una ráfaga de inspiración, con acertado planteo del DT a la hora de ejecutar las modificaciones y con buena respuesta de sus jugadores que aguantaron el resultado hasta el final, principalmente Diego Rodriguez, quien descolgó un remate en el último minuto que podría haber terminado con la suerte del "Rojo".

Lo cierto es que el partido habia que ganarlo, tanto este como las tres finales que le quedan al equipo de Omar De Felippe, que se encuentra en la tercera ubicación en puesto de ascenso, por lo menos hasta que juegue Instituto. En el horizonte está Defensa y Justicia, rival con quien se verá las caras el próximo sábado a partir de las 17hs en el Libertadores de América.


Escrito por Bruno Gomez - @brunoegomez